El Ministerio de Relaciones Exteriores emite un consejo urgente de viaje para "tener cuidado" en un destino turístico popular

Se ha instado a los turistas británicos que se dirigen a un popular destino turístico a tener precaución al realizar una actividad durante su viaje. El Ministerio de Asuntos Exteriores, de la Commonwealth y de Desarrollo (FCDO) ha actualizado sus recomendaciones de viaje para Turquía , advirtiendo sobre la posibilidad de lesiones graves o la muerte.
Un gran número de turistas acude a Turquía cada año para disfrutar de sus pintorescas playas y su clima cálido. Sin embargo, el Ministerio de Asuntos Exteriores ha recomendado a los turistas tener precaución al nadar en Turquía. Según el FCDO, se han registrado casos de personas ahogadas en el mar y en piscinas en Turquía.
El consejo, actualizado el 22 de agosto, indicaba: «Cada año, en Turquía, se ahogan personas en el mar y en piscinas. Supervise siempre a los niños, incluso si saben nadar o hay un socorrista presente».
Tenga cuidado al nadar en el mar. Algunas playas pueden tener fuertes corrientes submarinas.
También se ha solicitado a los turistas que no se sumerjan en aguas desconocidas. Añadió: «Las rocas ocultas o las aguas poco profundas pueden causar lesiones graves o la muerte. No se sumerjan en aguas desconocidas. Sigan las recomendaciones locales en caso de presencia de medusas o erizos».
Muchas playas tienen un sistema de banderas. Asegúrate de comprenderlo y seguir las advertencias (una bandera roja significa que no debes entrar al agua). Sigue las instrucciones de los socorristas. Extrema la precaución y consulta con la comunidad local si no hay socorristas, banderas o señales.
El último consejo llega meses después de que el FCDO emitiera una actualización sobre el parapente en Turquía después de varios incidentes en los que turistas del Reino Unido perdieron la vida o sufrieron lesiones graves mientras practicaban parapente en la zona.
En abril, un trágico accidente de parapente en Fethiye, Turquía , se cobró la vida de un turista británico y su piloto después de que su paracaídas fallara poco después del despegue desde una montaña de 6.500 pies.
La pareja, de 22 y 29 años, cayó sobre un terreno rocoso y falleció en el lugar. El incidente, ocurrido durante un vuelo de alta adrenalina, provocó la suspensión temporal de las actividades de parapente en la zona. Las autoridades no han revelado los nombres de los involucrados.
El año pasado, la adolescente británica Lily Nichol quedó grave tras ser atropellada por un parapente mientras comía con su familia durante las vacaciones. La joven de 15 años, residente de Chester-le-Street, en el condado de Durham, resultó herida el último día de sus vacaciones en Ölüdeniz mientras comía pizza.
Daily Express